Frecuencia cardíaca anómala/Fibrilación auricular
Un cambio en el ritmo del corazón puede provocar un latido acelerado, lento o irregular, lo que puede afectar a la capacidad del corazón para bombear suficiente sangre y satisfacer las necesidades del organismo. De prolongarse, puede provocar insuficiencia cardíaca.
La mayor parte de las frecuencias cardíacas anómalas se puede tratar con medicamentos. En casos más graves, es posible que necesite un dispositivo médico, ablación por radiofrecuencia o cirugía. Si le preocupa su ritmo cardíaco, debe comentarlo con su médico.
¿Qué es la fibrilación auricular?
La fibrilación auricular (FA) es la anomalía del ritmo cardíaco o arritmia cardiaca más frecuente. La FA a menudo coexiste con la insuficiencia cardíaca. La FA se produce cuando las cavidades superiores del corazón, también conocidas como aurículas, tienen una activación eléctrica descoordinada y, en consecuencia, una contracción auricular ineficaz. Se caracteriza por una frecuencia cardíaca irregular, que puede ser muy rápida, y se diagnostica mediante un electrocardiograma (ECG).
Pueden producirse episodios de arritmia y luego desaparecer espontáneamente (lo que se conoce como FA paroxística) o ser continuos (llamados FA persistente o permanente). Algunos de los factores que contribuyen al desarrollo de la FA son: edad avanzada, hipertensión, diabetes mellitus, tabaquismo, consumo de alcohol, insuficiencia cardíaca, enfermedad coronaria, enfermedad renal crónica, obesidad y apnea obstructiva del sueño.
Consecuencias: algunos pacientes sienten claramente los síntomas de la FA, mientras que otros pueden no sentirlos. Los síntomas incluyen palpitaciones, dificultad para respirar, fatiga, dolor en el pecho, baja tolerancia al ejercicio, mareos o síntomas más graves.
Los dos riesgos principales de esta alteración frecuente del ritmo cardíaco son: el desarrollo o deterioro de una insuficiencia cardíaca y el accidente cerebrovascular.
En la FA, las cavidades auriculares han perdido su capacidad de contracción. Esta pérdida de la secuencia normal de contracción auricular y ventricular puede empeorar la función de bombeo y aumentar los síntomas de insuficiencia cardíaca. Además, el estancamiento de la sangre en las aurículas puede dar lugar a la formación de coágulos. Es precisamente el desplazamiento de estos pequeños coágulos a través del sistema circulatorio lo que puede provocar un accidente cerebrovascular.
Tratamiento de la fibrilación auricular: el tratamiento de la FA lo determina de forma personalizada un equipo médico que incluye un cardiólogo, un médico general y un enfermero. Dentro del equipo de tratamiento de la FA puede haber un psicólogo, un dietista y un farmacéutico.
El tratamiento de esta arritmia se puede dividir en tres ámbitos principales:
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- Tratamiento con anticoagulantes
Las evaluaciones del riesgo de accidente cerebrovascular y de hemorragia son específicas para cada paciente. En función de estos aspectos, se puede proponer un tratamiento anticoagulante (diluyente sanguíneo). - Control de los síntomas con control de la frecuencia cardíaca o del ritmo cardíaco
Dependiendo de cada paciente, se pueden proponer muchas estrategias para controlar el ritmo cardíaco.
Entre ellas, por ejemplo, medicamentos para ralentizar el corazón, medicamentos antiarrítmicos o tratamientos con anestesia, por ejemplo, bloquear la arritmia usando una descarga eléctrica en el corazón o una ablación (marcando su superficie). - Gestión de los factores de riesgo cardiovascular:
Pueden ser necesarias modificaciones en el estilo de vida, por ejemplo, dejar de fumar, disminuir el consumo de alcohol, modificar la dieta y aumentar los niveles de actividad/ejercicio. La participación activa de cada paciente es un componente esencial para el tratamiento satisfactorio de la FA.
- Tratamiento con anticoagulantes
¿Qué provoca? Los episodios de latidos rápidos, ya sean supraventriculares, desde las cavidades superiores, o arritmias ventriculares, desde las cavidades principales de bombeo, son bastante frecuentes y a menudo se asocian con un empeoramiento de los síntomas que puede requerir hospitalización. El tratamiento médico de la insuficiencia cardíaca disminuye la frecuencia de esas complicaciones, pero a menudo no las elimina. Cuando el riesgo de arritmias ventriculares es alto, se puede implantar un desfibrilador cardíaco implantable (DAI) para tratar estas arritmias graves, que pueden provocar un empeoramiento de los síntomas o la muerte súbita.
Un catéter es un tubo o alambre largo y delgado que se puede insertar en una vena y moverlo hasta el corazón. La ablación con catéter es actualmente la terapia más eficaz para reducir las arritmias o alteraciones de la frecuencia cardíaca. Con la insuficiencia cardíaca, los cambios dentro de las células del corazón pueden modificar el patrón de señales eléctricas que producen los latidos cardíacos (activación eléctrica). Por lo tanto, algunas partes del corazón pueden activarse espontáneamente (contracciones prematuras) o convertirse en parte de un circuito eléctrico o sistema de reentrada que puede conducir a una frecuencia cardíaca rápida persistente. La ablación con catéter tiene como objetivo crear cicatrices superficiales en el sistema de conducción eléctrica del corazón para eliminar el área que desencadena la arritmia, utilizando un catéter de radiofrecuencia o un criobalón de aplicación de frío. La ablación con catéter suele ser eficaz para eliminar o reducir la frecuencia de la FA.
La ablación con catéter se utiliza por dos motivos principales:
- La disminución de los episodios de latidos rápidos inducidos por arritmias supraventriculares (aleteo auricular, FA) o ventriculares.
- La disminución del riesgo de muerte cardíaca súbita (taquicardia ventricular, fibrilación ventricular).
La ablación con catéter se lleva utilizado décadas y se ha demostrado que reduce las arritmias de manera eficiente y que mejora la función cardíaca en casos específicos.
La ablación con catéter consta de 3 partes:
- Un catéter de diagnóstico para localizar las señales eléctricas y trazar el patrón de conducción.
- Un catéter de ablación para generar cicatrices con diferentes tipos de energía (radiofrecuencia, crioterapia).
- Un sistema para localizar la posición del catéter en el corazón (fluoroscopia o sistema tridimensional).
¿Cómo se realiza? La introducción del catéter en el corazón se realiza colocando una pequeña aguja en una vena, generalmente en la ingle, con anestesia local. La primera parte del procedimiento consiste en estudiar y localizar el origen de la arritmia. La ablación con catéter, que a menudo se realiza en el mismo procedimiento, generalmente requiere anestesia general ligera o sedación. Se realizan varias aplicaciones de energía para crear pequeñas cicatrices en las zonas apropiadas del sistema de conducción eléctrica del corazón. Se mide regularmente el éxito del procedimiento para comprobar que no se desencadene una conducción eléctrica anormal, y esto define el final del procedimiento.
Después del procedimiento: después del procedimiento permanecerá durante 24-48 horas en una sala de cardiología para controlar si la arritmia reaparece. Dependiendo de la arritmia y del procedimiento, es posible que le pidan que no haga esfuerzos durante unos días después de irse a casa.
Los eventos adversos son potencialmente raros, pero posibles, y pueden incluir sangrado, necesidad de cirugía cardíaca, embolia (coágulo de sangre), arritmia o lesión en el sistema de conducción eléctrica que requiere que le coloquen un marcapasos.
Pueden producirse recurrencias de la arritmia en los primeros meses debido a algunos cambios durante el proceso de curación. El procedimiento de ablación con catéter se puede realizar varias veces para tratar la recurrencia u otras arritmias que puedan desarrollarse.